Esteroides anabólicos y otras drogas para mejorar la apariencia y el rendimiento

Los esteroides anabólico-androgénicos, frecuentemente abreviados como "esteroides anabólicos", "esteroides" o "andrógenos",^2,3 son los APED de los que más se abusa. Se trata de sustancias sintéticas similares a la hormona sexual masculina testosterona. Favorecen el crecimiento del músculo esquelético (efectos anabolizantes) y el desarrollo de las características sexuales masculinas (efectos androgénicos) tanto en hombres como en mujeres.²

Estos compuestos a veces son usados con fines médicos para tratar el retraso de la pubertad y la pérdida de masa muscular debida a una enfermedad⁴ y para tratar los niveles bajos de testosterona en hombres con una afección médica asociada.⁵ Los esteroides anabólicos androgénicos también pueden mejorar la sensación de bienestar y reforzar los huesos, pero no están aprobados para estos fines. Sin embargo, la terapia de suplementación con testosterona es un tratamiento cada vez más común para los problemas de estado de ánimo y de rendimiento sexual asociados al envejecimiento masculino, y su prescripción a hombres más jóvenes ha generado controversia.⁶

Tenga en cuenta que, en el contexto de este informe, los esteroides anabólicos se refieren únicamente al consumo no prescrito (uso indebido) de testosterona y sustancias similares a la testosterona por parte de atletas y culturistas no deportistas. Este informe de investigación no cubrirá los potenciadores de la imagen, como los rellenos dérmicos, el Botox o el bronceador de la piel, conocido como melanotan (en inglés).⁷

Los anabólicos que no son esteroides, incluyen la insulina, la hormona del crecimiento similar a la insulina (IGF, por su sigla en inglés) y la hormona del crecimiento humano (HGH, por su sigla en inglés), sustancias que produce el cuerpo humano y que se prescriben para usos médicos legítimos, pero que a veces también se usan indebidamente para mejorar el rendimiento.

Los ergos/termogénicos son compuestos que se usan para disminuir la grasa corporal o para promover la delgadez en lugar de la masa muscular en los atletas de resistencia.⁸ Las tres categorías principales de ergo/termogénicos son:

• Xantinas: compuestos que aumentan la atención y el estado de vigilia y suprimen el apetito. Algunos ejemplos son la cafeína, el medicamento para el asma teofilina y la teobromina, una sustancia presente en el chocolate, el café y el té.⁹
• Simpaticomiméticos: drogas similares en estructura y acción a la epinefrina y la norepinefrina, sustancias químicas naturales del organismo que aumentan el ritmo cardíaco, contraen los vasos sanguíneos y elevan la presión arterial. Un ejemplo es la efedrina, que se obtiene de la planta efedra. La efedrina/efedra antes estaba incluida en suplementos dietéticos que promovían la pérdida de peso, el aumento de la energía y la mejora del rendimiento atlético.¹⁰ En 2004, la FDA prohibió la venta de suplementos dietéticos que contuvieran efedrina/efedra en EE.UU. debido a varios posibles riesgos para la salud, incluidos los efectos cardiovasculares y sobre el sistema nervioso.¹¹
• Hormonas tiroideas: sustancias que regulan el metabolismo alterando la función de la tiroides.¹² El citomel es un ejemplo.
  Los suplementos nutricionales/dietéticos son sustancias adquiridas legalmente en tiendas de nutrición o a través de Internet que suelen tomarse en combinación con otros APEDs. La creatina, que potencia la capacidad de ejercicio, es un ejemplo común.

En Estados Unidos, los suplementos dietéticos que contienen precursores de esteroides, como la tetrahidrogestrinona (THG) y la androstenediona, antes podían adquirirse legalmente sin receta. Los atletas tomaban precursores de esteroides en un esfuerzo por aumentar los niveles de testosterona. Se sabe menos sobre los efectos secundarios de los precursores de esteroides, pero si grandes cantidades de estos compuestos aumentan los niveles de testosterona en el organismo de forma sustancial, entonces también es probable que produzcan los mismos efectos secundarios que los propios esteroides anabólicos.¹³ La compra de estos suplementos, con la notable excepción de la dehidroepiandrosterona (DHEA), pasó a ser ilegal tras la aprobación de la Ley de Control de Esteroides Anabólicos de 2004, que modificó la Ley de Sustancias Controladas.¹⁴

Todos los datos se refieren a la población de Estados Unidos.

Es difícil estimar la prevalencia del uso indebido de esteroides en Estados Unidos porque muchas encuestas nacionales que preguntan sobre el consumo de drogas no incluyen preguntas sobre los esteroides. Sin embargo, se dispone de datos sobre el uso indebido de esteroides entre los jóvenes estudiantes a partir de la encuesta Monitoring the Future, que cuenta con el apoyo del NIDA.

¿Cuántos jóvenes estudiantes usan esteroides?

En 2022, se estima que el 0,8% de los estudiantes de 8º grado, el 0,5% de los de 10º grado y el 1,3% de los de 12º grado declararon haber usado esteroides de forma indebida en los últimos 12 meses. Fuente: 2022 Monitoring the Future Survey.

Los esteroides anabólicos aumentan la masa muscular magra cuando se usan junto con el entrenamiento con pesas. El objetivo, para los levantadores de pesas que no son atletas, suele ser la mejora de la apariencia. Usar esteroides suele asociarse a una forma de trastorno dismórfico corporal masculino llamado dismorfia muscular, la preocupación por el tamaño percibido como inadecuado de sus músculos.¹⁹

Como resultado, algunos usuarios afirman tomar esteroides anabólicos para aumentar la confianza en sí mismos y porque sienten que han llegado a un punto en el que ya no pueden aumentar de tamaño sólo con el entrenamiento con pesas. La mayoría de los usuarios afirman que los esteroides anabólicos les ayudan a conseguir su cuerpo ideal.²⁸

El aumento de la masa muscular también puede favorecer la fuerza, lo que puede mejorar el rendimiento en determinados tipos de deportes. Se observan más beneficios en los deportes que dependen de la fuerza (levantamiento de pesas, lanzamiento de peso, fútbol americano) que en los deportes que requieren velocidad, agilidad, flexibilidad y/o resistencia.²⁹

Los usuarios de esteroides anabólicos también afirman que sus músculos se recuperan de forma más rápida de los esfuerzos intensos y las lesiones musculares.³⁰ Las investigaciones en animales no han respaldado de forma concluyente esta creencia, ya que algunas muestran que los esteroides anabólicos pueden mejorar la recuperación de ciertos tipos de daño muscular,^31,32 pero otras no encuentran ningún beneficio en tomar esteroides anabólicos para mejorar la recuperación muscular.³³

Los usuarios de esteroides anabólicos declaran haber usado un promedio de 11 APED al año. También son más propensos que los no consumidores de esteroides a tomar suplementos como proteínas en polvo y creatina; bloqueadores de estrógenos; ergo/termogénicos, como cafeína o efedrina; medicamentos para la disfunción eréctil; y otras hormonas como insulina, hormonas tiroideas y hormona de crecimiento humano.²⁶

Algunos esteroides anabólicos se toman por vía oral, otros se inyectan por vía intramuscular,²⁹ y otros se suministran en geles o cremas que se aplican sobre la piel.³⁵ Muchos de los consumidores empiezan con la forma oral y luego progresan a las formas inyectables,³⁶ ya que estas últimas causan menos daños hepáticos. Sin embargo, los esteroides orales se eliminan más rápidamente del organismo, lo que suele hacer que ésta sea la vía preferida por los usuarios preocupados por las pruebas de drogas.²⁹ Las dosis de las personas que abusan de estas sustancias pueden ser de 10 a 100 veces superiores a las dosis usadas para tratar afecciones médicas.³⁶

Ciclos, apilamiento, piramidal y plateauing

Los esteroides se suelen usar en patrones llamados " ciclos". Esto implica tomar múltiples dosis de esteroides durante un periodo de tiempo específico, parar durante un tiempo y volver a empezar. Las personas que usan esteroides de forma indebida también suelen "apilar" las drogas, lo que significa que toman dos o más esteroides anabólicos diferentes, mezclan tipos orales y/o inyectables, y a veces incluso toman compuestos que están diseñados para uso veterinario.^37,38 La creencia es que los diferentes esteroides interactúan para producir un efecto sobre el tamaño muscular que es mayor que los efectos de cada droga por separado,³⁶ una teoría que no se ha probado científicamente.

Otro modo común de uso indebido de esteroides se conoce como " piramidal ", que consiste en tomarlos en un ciclo de seis a 12 semanas, disminuyendo gradualmente en lugar de empezar y terminar un ciclo bruscamente. Al principio de un ciclo, la persona empieza con dosis bajas de las drogas que se apilan y luego aumenta lentamente las dosis. En la segunda mitad del ciclo, las dosis se reducen lentamente hasta cero. Esto a veces va seguido por un segundo ciclo en el que la persona sigue entrenando pero sin drogas. Los consumidores de esteroides creen que el método piramidal da tiempo al cuerpo a adaptarse a las dosis altas, y el ciclo sin drogas da tiempo al sistema hormonal del cuerpo a recuperarse.²

También puede usarse una técnica llamada " plateauing ", que consiste en escalonar los esteroides, superponerlos o sustituirlos por otro tipo de esteroides para evitar desarrollar tolerancia.³⁶ Al igual que con el apilamiento, los efectos del piramidal, el ciclo y el plateauing no han sido corroborados científicamente.

A variety of side effects can occur when anabolic steroids are misused, ranging from mild effects to ones that are harmful or even life-threatening. Most are reversible if the user stops taking the drugs. However, others may be permanent or semi-permanent.

Most data on the long-term effects of anabolic steroids in humans come from case reports rather than formal epidemiological studies. Serious and life-threatening adverse effects may be underreported, especially since they may occur many years later. One review found 19 deaths in published case reports related to anabolic steroid use between 1990 and 2012; however, many steroid users also used other drugs, making it difficult to show that the anabolic steroid use caused these deaths.³⁹ One animal study found that exposing male mice for one fifth of their lifespan to steroid doses comparable to those taken by human athletes caused a high frequency of early deaths.⁴⁰

Sistema cardiovascular

El uso de esteroides se ha relacionado con la hipertensión arterial;⁴¹ la disminución de la función de los ventrículos del corazón;^23,41,42 y enfermedades cardiovasculares como ataques cardíacos,⁴³ lesiones arteriales,⁴⁴ y derrames cerebrales,^45,46 incluso en atletas menores de 30 años. Los esteroides contribuyen al desarrollo de enfermedades cardiovasculares en parte aumentando el nivel de lipoproteínas de baja densidad (LDL, por su sigla en inglés)⁴⁷ y disminuyendo el nivel de lipoproteínas de alta densidad (HDL, por su sigla en inglés).^47,48 Los niveles altos de LDL y bajos de HDL aumentan el riesgo de aterosclerosis, una enfermedad en la que las sustancias grasas se depositan en el interior de las arterias e interrumpen el flujo sanguíneo. Si se impide que la sangre llegue al corazón o al cerebro, el resultado puede ser un ataque cardíaco o un derrame cerebral, respectivamente. Los esteroides también aumentan el riesgo de que se formen coágulos en los vasos sanguíneos, lo que puede interrumpir el flujo sanguíneo y dañar el músculo cardiaco, de modo que no consiga bombear la sangre con eficacia.⁴⁹

Sistema hormonal

Usar esteroides altera la producción normal de hormonas en el organismo. Los cambios que pueden revertirse incluyen la disminución de la producción de esperma,^56-59 la disminución de la función de los testículos (hipogonadismo) que conduce a niveles bajos de testosterona,⁶⁰ y el encogimiento de los testículos (atrofia testicular).^56,61 Los cambios irreversibles incluyen la calvicie de patrón masculino y el desarrollo de senos (ginecomastia) en los hombres.^59,62 Los esteroides anabólicos también pueden actuar sobre el sistema hormonal para aumentar el riesgo de cáncer testicular, especialmente cuando los esteroides se usan en combinación con el factor de crecimiento similar a la insulina.⁶³
En las mujeres, los esteroides anabólicos causan masculinización. Específicamente, el tamaño de los senos y la grasa corporal disminuyen, la piel se vuelve áspera y la voz se hace más grave.⁶⁴ Las mujeres pueden experimentar un crecimiento excesivo del vello corporal pero perder el vello del cuero cabelludo.⁶⁵ Con la administración continuada de esteroides, algunos de estos efectos se vuelven irreversibles. Se suele creer que los esteroides anabólicos producen un agrandamiento irreversible del clítoris en las mujeres, aunque no existen estudios al respecto.⁶⁶

Infecciones

Muchas personas que se inyectan esteroides anabólicos pueden usar técnicas de inyección no estériles o compartir agujas contaminadas por otros usuarios. Esto pone a estos usuarios de esteroides en riesgo de adquirir infecciones víricas potencialmente mortales, como el VIH y las hepatitis B y C.⁷⁶ Además, los modelos animales indican que los esteroides anabólicos suprimen el sistema inmunológico,⁷⁷ lo que podría empeorar las infecciones.

Hígado

El uso indebido de esteroides se ha asociado a daños hepáticos,^50,51 tumores,^46,52,53 y a una enfermedad poco frecuente denominada peliosis hepática, en la que se forman quistes llenos de sangre en el hígado.⁵⁴ Los quistes pueden romperse, provocando hemorragias internas e incluso la muerte en casos raros.⁵⁵

Sistema musculoesquelético

El aumento de los niveles de testosterona y otras hormonas sexuales normalmente desencadena el estirón que se produce durante la pubertad y la adolescencia. Estos niveles crecientes de testosterona también proporcionan las señales para detener el crecimiento.⁶⁷ Cuando un niño o adolescente toma esteroides anabólicos, los niveles artificialmente elevados de hormonas sexuales resultantes pueden hacer que los huesos dejen de crecer de forma prematura.⁶⁸

Existen pruebas de que los levantadores de pesas que abusan de los esteroides anabólicos tienen tendones más rígidos, lo que podría aumentar el riesgo de lesiones en los tendones.⁶⁹

Piel

El uso indebido de esteroides puede provocar acné,^70-72 caída del cabello en la cabeza, quistes y cabello y piel grasos.⁶⁵ Los usuarios que se inyectan esteroides también pueden desarrollar dolor y formación de abscesos en los puntos de inyección.⁷³

Los esteroides anabólicos también pueden producir ictericia, o coloración amarillenta de la piel o los ojos, como consecuencia de daños en el hígado.^74,75

Agresividad

Los informes de casos y estudios pequeños indican que los esteroides anabólicos aumentan la irritabilidad y la agresividad,⁷⁵ aunque los hallazgos pueden verse confundidos por los rasgos de personalidad que están sobrerrepresentados en los consumidores de esteroides (es decir, el trastorno antisocial, límite e histriónico de la personalidad)⁷⁸ y el uso de otras drogas.⁷⁹ Las personas que usan de forma indebida los esteroides anabólicos reportan tener más ira que los que no usan,⁸⁰ así como más peleas, agresividad verbal y violencia hacia sus seres queridos,⁸¹ a veces llamada " furia esferoidal" (“roid rage” en inglés). Un estudio sugiere que los efectos sobre el estado de ánimo y el comportamiento que se observan durante el abuso de esteroides anabólicos-androgénicos pueden ser el resultado de cambios hormonales secundarios.⁸²

Los científicos han intentado probar la asociación entre los esteroides anabólicos y la agresividad administrando dosis altas de esteroides o placebo durante días o semanas a voluntarios humanos y evaluando después los síntomas conductuales. En uno de esos estudios, los investigadores descubrieron que la testosterona durante un periodo de seis semanas se asociaba con un aumento de la agresividad, evaluada mediante un cuestionario y un modelo informático de comportamiento agresivo.⁸³ Además, las dosis altas de esteroides producían mayores sensaciones de irritabilidad y agresividad que el placebo,⁸⁴ aunque los efectos parecen ser muy variables entre individuos,¹⁹ y otros estudios no han mostrado ese efecto.⁸⁵ Una posible explicación, según los investigadores, es que algunos esteroides anabólicos, pero no todos, aumentan la irritabilidad y la agresividad.

Trastornos psiquiátricos

Los consumidores de esteroides anabólicos son más propensos que los no consumidores a manifestar ansiedad.^34,86 Las dosis moderadas a altas de esteroides anabólicos también se asocian con trastornos importantes del estado de ánimo, como manía, hipomanía,⁸⁷ y depresión grave.^86,87 En un estudio, los síntomas maníacos no fueron uniformes entre los individuos, ya que la mayoría mostró pocos cambios psicológicos, mientras que unos pocos demostraron efectos prominentes.¹⁹

Consumo de otras drogas

Los consumidores de esteroides anabólicos son más propensos a consumir drogas como la marihuana, los opioides con receta, la cocaína⁸⁸ o la heroína.⁸⁶ En un estudio de hombres admitidos a tratamiento por trastornos por consumo de opioides, el 25% declaró el uso previo de esteroides anabólicos. Algunos describieron que habían conocido los opioides por primera vez a través de amigos del gimnasio, y que habían comprado opioides por primera vez a la misma persona que les había vendido los esteroides anabólicos.⁸⁹ En un estudio de consumidores de esteroides anabólicos dependientes del analgésico opioide inyectable nalbufina, la mayoría informó de que habían empezado a usar nalbufina para tratar el dolor de las lesiones producidas por el levantamiento de pesas. También describieron un amplio consumo de nalbufina en sus gimnasios.⁹⁰

Las investigaciones también indican que algunos usuarios podrían recurrir a otras drogas para aliviar algunos de los efectos negativos de los esteroides anabólicos. Por ejemplo, un estudio de 227 hombres admitidos en 1999 en un centro privado de tratamiento por adicción a la heroína u otros opioides descubrió que el 9,3% había consumido esteroides anabólicos previamente. De ellos, la mayoría declaró haber usado opioides para contrarrestar el insomnio, la irritabilidad, la depresión y el síndrome de abstinencia de los esteroides anabólicos.⁹¹

A diferencia de la mayoría del consumo de drogas ilícitas, el uso indebido de esteroides anabólicos suele comenzar en la edad adulta joven y no en la adolescencia. Pero el consumo de esteroides en adolescentes es preocupante, sobre todo porque los sistemas hormonales con los que interactúan desempeñan un papel fundamental en el desarrollo del cerebro durante estos años.^92-96 En ratones de laboratorio adolescentes, la exposición a los esteroides anabólicos aumentó la densidad de las espinas neuronales en el hipocampo y la amígdala, regiones del cerebro implicadas en el aprendizaje y las emociones (por ejemplo, la agresividad), respectivamente. Cuatro semanas después de su administración, estos aumentos de las densidades de las espinas neuronales volvieron a la normalidad en la amígdala, pero no en el hipocampo. Esto sugiere que la exposición a esteroides en la pubertad podría producir cambios estructurales duraderos en ciertas regiones cerebrales.⁹⁷

Los adolescentes que usan esteroides anabólicos también pueden correr un mayor riesgo de sufrir algunos efectos secundarios cognitivos en comparación con los adultos. Por ejemplo, los varones que empiezan a usar esteroides anabólicos durante la adolescencia muestran un aumento de la impulsividad y una disminución de la atención, en comparación con los hombres que empezaron a usar esteroides en la edad adulta.⁹⁸ En ratas adolescentes, la exposición a esteroides anabólicos se asocia con desequilibrios electrolíticos, hiperactividad, ansiedad y un aumento de la modulación autonómica simpática (por ejemplo, respuesta de lucha o huida) durante la edad adulta, incluso cuando el consumo de esteroides se abandonó durante la adolescencia.⁹⁹ Además, los hámsters machos adolescentes que recibieron esteroides anabólicos muestran un aumento de la agresividad, incluso después de haber dejado de usar esteroides. Estos efectos agresivos son paralelos a los cambios en los niveles de serotonina^100,101 y los receptores de andrógenos en el cerebro de los roedores.¹⁰²

Los esteroides anabólicos actúan en los receptores de andrógenos para influir en el funcionamiento celular y la expresión génica. Además de regular las vías implicadas en el desarrollo de las características masculinas,¹⁰³ la activación de los receptores de andrógenos también produce un rápido aumento de los niveles de calcio en el músculo esquelético, el corazón y las células cerebrales.¹⁰⁴ El calcio desempeña un papel importante en la señalización neuronal.

Las investigaciones con células humanas demuestran que los esteroides anabólicos también interactúan con ciertos tipos de receptores GABAA, que podrían mediar en el aumento de la ansiedad reportado por los consumidores de esteroides.^105,106 Además, los estudios en animales muestran que los esteroides anabólicos aumentan los niveles de serotonina en las regiones cerebrales implicadas en el estado de ánimo¹⁰⁷ y los niveles de dopamina en las regiones cerebrales relacionadas con la recompensa.^107,108 También se ha demostrado que el consumo crónico de esteroides anabólicos causa disfunción de estas vías de recompensa en los animales. Específicamente, las ratas a las que se les administraron inyecciones de nandrolona dos veces al día durante cuatro semanas mostraron una pérdida de la preferencia por lo dulce (un signo de disfunción de la recompensa) que iba acompañada de reducciones de dopamina, serotonina y noradrenalina en el núcleo accumbens, una región cerebral relacionada con la recompensa.¹⁰⁹

Un porcentaje indeterminado de usuarios de esteroides puede desarrollar un trastorno por consumo de esteroides. Los trastornos por consumo de sustancias se definen por un uso continuado a pesar de las consecuencias adversas; en el caso de los consumidores de esteroides, éstas pueden incluir problemas físicos o psicológicos como el crecimiento de los senos (en los hombres), disfunción sexual, hipertensión, exceso de grasas en la sangre, enfermedades cardiacas, cambios de humor, irritabilidad grave o agresividad. Los consumidores de esteroides anabólicos también pueden renunciar a otras actividades importantes por miedo a perderse los entrenamientos, a violar sus restricciones dietéticas o a que se les impida usar esteroides. Los consumidores de esteroides también suelen gastar grandes cantidades de tiempo y dinero en obtener las drogas, y pueden intentar reducir o dejar el consumo de esteroides anabólicos sin éxito, posiblemente debido a la depresión, la ansiedad por perder masa muscular u otros efectos desagradables de la abstinencia.¹¹⁰

La abstinencia de los esteroides se produce cuando un individuo desarrolla dependencia. Una revisión de la investigación sugiere que alrededor del 32% de las personas que usan esteroides anabólicos de forma indebida se vuelven dependientes.²³ Los síntomas de la dependencia pueden incluir la tolerancia, que es la necesidad de tomar más esteroides para conseguir los mismos efectos. Otro indicador de dependencia es el síndrome de abstinencia una vez que se deja de usar esteroides anabólicos.¹¹⁰ Los síntomas de abstinencia pueden incluir fatiga, inquietud, pérdida de apetito, insomnio, disminución del deseo sexual y antojos de esteroides.¹¹¹ El más peligroso de los síntomas de abstinencia es la depresión, porque a veces conduce a intentos de suicidio.¹¹²

Aunque los levantadores de pesas que no son atletas representan la mayor parte del consumo indebido de esteroides anabólicos, el uso ocasional de esteroides por parte de atletas profesionales y olímpicos para mejorar el rendimiento o hacer trampas en la competición ("dopaje") es lo que más ha contribuido para aumentar la concienciación sobre el consumo indebido de esteroides. La Agencia Mundial Antidopaje (WADA, por su sigla en inglés) se fundó en 1999 para aplicar de forma coherente las políticas antidopaje en todas las organizaciones deportivas y gobiernos del mundo. Las organizaciones que no cumplen las normas pueden enfrentarse a sanciones como la cancelación de eventos, la pérdida de la financiación de la WADA o la inelegibilidad para albergar eventos.¹¹⁴

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Fuente: WADA. 2015 Anti-Doping Rule Violations (ADRVs) Report. 2017.

Los avances en las pruebas de drogas han mejorado la capacidad de detectar infracciones antidopaje, lo que ha dado lugar a un aumento del número de infracciones notificadas en los últimos años. Por ejemplo, el descubrimiento de metabolitos de esteroides a largo plazo ha alargado la ventana de detección de drogas, haciendo más difícil que los deportistas pasen los controles antidopaje simplemente dejando de usar esteroides justo antes de un evento. Además, tecnologías más sensibles han permitido la detección de umbrales de metabolitos más bajos.¹¹⁵

Aunque en la actualidad existen procedimientos de pruebas para frenar el consumo de esteroides entre los atletas profesionales y olímpicos, constantemente aparecen nuevas drogas de diseño que pueden escapar a la detección y poner a los atletas dispuestos a hacer trampas un paso por delante de los esfuerzos de las pruebas.^116-118 Para detectar el consumo temprano de esteroides de diseño y proporcionar estándares de referencia más precisos para cada atleta, los laboratorios de pruebas almacenan los datos de cada muestra de análisis de drogas. Estas muestras se utilizan como puntos de referencia para pruebas futuras, eliminando así la posibilidad de que una persona dé positivo simplemente porque tiene niveles naturalmente elevados de testosterona en comparación con la población general.¹¹⁹ El consumo a largo plazo de esteroides de diseño suprime los niveles de esteroides endógenos en las muestras de orina, lo que podría ser el primer indicio de que un atleta está tomando un esteroide de diseño.¹¹⁷

Según los códigos de la WADA, los atletas son responsables de cualquier sustancia prohibida que se encuentre en sus muestras, independientemente de si la ingestión fue intencionada o no. Sin embargo, las sanciones pueden reducirse o evitarse si el deportista puede demostrar que la sustancia fue ingerida sin culpa o negligencia significativas por su parte, o en algunas circunstancias en las que el atleta no tenía la intención de mejorar su rendimiento.¹²⁶

Las investigaciones sugieren que es menos probable que los atletas de secundaria usen esteroides si sus compañeros y sus padres lo desaprueban, lo que indica que los compañeros y los padres pueden ser socios fuertes en los esfuerzos de prevención.¹²⁷

Sin embargo, las investigaciones demuestran que limitarse a enseñar a los estudiantes los efectos adversos de los esteroides no convence a los adolescentes de que vayan a verse afectados negativamente, ni dicha instrucción disuade a los jóvenes de tomar esteroides en el futuro. Presentar tanto los riesgos como los beneficios del consumo de esteroides anabólicos es más eficaz para convencer a los adolescentes de los efectos negativos de los esteroides, debido aparentemente a que los estudiantes encuentran más creíble un enfoque equilibrado.¹²⁸

Las investigaciones también indican que algunos adolescentes usan de forma indebida los esteroides como parte de un patrón de comportamientos de alto riesgo como beber y conducir, llevar un arma, conducir una motocicleta sin casco y consumir otras drogas ilícitas. Esto sugiere que un programa de prevención debería centrarse en la detección exhaustiva de conductas de alto riesgo y el asesoramiento entre los adolescentes que usan esteroides anabólicos.¹²⁹

El programa Atletas Orientadas a Alternativas Saludables de Ejercicio y Nutrición (ATHENA, por su sigla en inglés) se basó en el modelo del programa ATLAS, pero diseñado para las jóvenes adolescentes de equipos deportivos. Las primeras pruebas realizadas a las jóvenes inscritas en el programa ATHENA mostraron descensos significativos, en comparación con los controles, en comportamientos de riesgo como viajar con un conductor ebrio o mantener relaciones sexuales con nuevas parejas. Las participantes en ATHENA también eran menos propensas al consumo de pastillas para adelgazar, anfetaminas, esteroides anabólicos y suplementos para aumentar la masa muscular durante la temporada deportiva. Aunque el programa no tuvo un efecto inmediato sobre el consumo de tabaco, alcohol o marihuana,¹³¹ las atletas entrenadas por ATHENA declararon haber usado menos estas sustancias a lo largo de su vida cuando se las encuestó entre uno y tres años después de graduarse de las escuelas secundarias. El consumo de píldoras dietéticas y esteroides disminuyó en este seguimiento de uno a tres años tanto para las atletas entrenadas por ATHENA como para las del grupo de control, de modo que estos grupos ya no se diferenciaban en el uso de estas sustancias.¹³²

Las personas que consumen esteroides no suelen buscar tratamiento para su consumo, y un estudio informaba de que el 56% de los consumidores nunca habían informado a su médico sobre su consumo.¹³³ Esto podría deberse a que los consumidores creen que su médico carece de conocimientos sobre los esteroides anabólicos.¹³³ Además, muchos sitios de Internet dedicados a los esteroides anabólicos y otros APED cuestionan la profesionalidad de los proveedores de cuidados de salud y ofrecen sus propios consejos sobre el consumo de APED, que son cuestionables desde el punto de vista médico.¹³⁴ Esto hace que sea importante que los proveedores de cuidados de salud estén informados sobre los signos y síntomas del consumo de esteroides en sus pacientes.¹¹¹

Los puntos de vista actuales recomiendan que el tratamiento del consumo de esteroides aborde las causas subyacentes del mismo. Esto puede incluir

• terapias psicológicas (y posiblemente medicamentos) para la dismorfia muscular
• terapias endocrinas para restablecer la función en quienes padecen hipogonadismo y para aliviar los síntomas de la depresión
• antidepresivos para aquellos cuya depresión no responde a las terapias endocrinas
• tratamientos farmacológicos y psicosociales para los pacientes que también son dependientes de los opioides, que parecen ser también eficaces para aliviar los signos de la dependencia de los esteroides anabólicos¹³⁵