Después de descender significativamente durante la pandemia de COVID-19, el consumo de sustancias entre los adolescentes ha seguido manteniéndose en niveles bajos por cuarto año consecutivo, según los últimos resultados de la Encuesta Monitoring the Future, financiada por los Institutos Nacionales de Salud (NIH, por su sigla en inglés). Estos datos recientes siguen documentando tendencias estables y en descenso en el consumo de la mayoría de las drogas entre los jóvenes.
“Esta tendencia en la reducción del consumo de sustancias entre los adolescentes no tiene precedentes”, afirmó la doctora Nora D. Volkow, directora del Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas (NIDA, por su sigla en inglés) de los NIH. “Debemos seguir investigando los factores que han contribuido a este menor riesgo de consumo de sustancias para adaptar las intervenciones para apoyar la continuación de esta tendencia.”
El consumo declarado de casi todas las sustancias estudiadas disminuyó drásticamente entre 2020 y 2021, tras el inicio de la pandemia de COVID-19 y los cambios relacionados, como el cierre de escuelas y el distanciamiento social. En 2022 y 2023, la mayor parte del consumo de sustancias notificado entre los adolescentes se mantuvo estable en estos niveles reducidos, con tendencias similares y algunos descensos en el consumo en 2024.
La encuesta Monitoring the Future está realizada por investigadores de la Universidad de Michigan, Ann Arbor, y financiada por el NIDA. La encuesta se realiza anualmente a estudiantes de octavo, décimo y duodécimo grado que informan sobre sus conductas de consumo de sustancias durante varios periodos de tiempo, como los últimos 30 días, los últimos 12 meses y toda la vida. La encuesta también documenta las percepciones de los estudiantes sobre el daño, la desaprobación del consumo y la disponibilidad percibida de las drogas. Los resultados de la encuesta se publican el mismo año en que se recogen los datos. Entre febrero y junio de 2024, los investigadores de Monitoring the Future recogieron 24.257 encuestas de estudiantes matriculados en 272 escuelas públicas y privadas de Estados Unidos.
Al analizar los datos por drogas específicas, la encuesta reveló que los adolescentes declararon haber consumido alcohol, nicotina, vaping y cannabis durante los 12 meses anteriores a la encuesta y que, en general, los niveles de consumo habían disminuido o se habían mantenido estables con respecto a los niveles de los últimos años. En comparación con los niveles comunicados en 2023, los datos comunicados en 2024 muestran:
- El consumo de alcohol se mantuvo estable entre los alumnos de octavo grado, con un 12,9% que declaró haberlo consumido durante los últimos 12 meses. El consumo de alcohol disminuyó entre los otros dos grados encuestados, con un 26,1% de los alumnos de 10º grado que declararon haberlo consumido durante los últimos 12 meses (en comparación con el 30,6% en 2023), y un 41,7% de los alumnos de 12º grado que declararon haberlo consumido durante los últimos 12 meses (en comparación con el 45,7% en 2023).
- El consumo de nicotina en vapeo permaneció estable entre los alumnos de 8º y 12º grado, con un 9,6% de los alumnos de 8º grado y un 21,0% de los alumnos de 12º grado que declararon haber vapeado nicotina durante los últimos 12 meses. Disminuyó entre los alumnos de 10º grado, con un 15,4% que declararon haber vapeado nicotina durante los últimos 12 meses (en comparación con el 17,6% en 2023).
- El consumo de bolsas de nicotina se mantuvo estable entre los alumnos de 8º grado, con un 0,6% que declaró haberlo consumido durante los últimos 12 meses. Aumentó entre los dos grados superiores, con un 3,4% de los alumnos de 10º grado que declararon haber consumido bolsas de nicotina durante los últimos 12 meses (en comparación con el 1,9% en 2023) y un 5,9% de los alumnos de 12º grado que declararon haber consumido bolsas de nicotina durante los últimos 12 meses (en comparación con el 2,9% en 2023).
- El consumo de cannabis se mantuvo estable en los grados más jóvenes, con un 7,2% de los alumnos de 8º grado y un 15,9% de los de 10º grado que declararon haber consumido cannabis durante los últimos 12 meses. El consumo de cannabis disminuyó entre los alumnos de 12º grado, con un 25,8% que declaró haberlo consumido durante los últimos 12 meses (frente al 29,0% en 2023). Es importante destacar que el 5,6% de los alumnos de 8º grado, el 11,6% de los de 10º grado y el 17,6% de los de 12º grado declararon haber vapeado cannabis durante los últimos 12 meses, lo que refleja una tendencia estable entre los tres grados.
- El consumo de Delta-8-THC (una sustancia psicoactiva que se encuentra en la planta Cannabis sativa) fue analizado por primera vez entre los alumnos de 8º y 10º grado en 2024, con un 2,9% de los alumnos de 8º grado y un 7,9% de los alumnos de 10º grado que declararon haberlo consumido durante los últimos 12 meses. El consumo declarado de delta-8 THC entre los alumnos de 12º grado se mantuvo estable, con un 12,3% que declaró haberlo consumido durante los últimos 12 meses.
- El consumo de cualquier droga ilícita distinta de la marihuana disminuyó entre los alumnos de 8º grado, con un 3,4% que declararon el consumo durante los últimos 12 meses en comparación con el 4,6% en 2023). Se mantuvo estable en los otros dos grados encuestados, con un 4,4% de los alumnos de 10º grado y un 6,5% de los alumnos de 12º grado que declararon haber consumido alguna droga ilícita distinta de la marihuana durante los últimos 12 meses. Estos datos se basan en las tendencias a largo plazo que documentan un consumo bajo y en descenso de las sustancias ilícitas declaradas entre los adolescentes, incluido el consumo de cocaína, heroína y el uso indebido de medicamentos con receta en los últimos años, a nivel general.
- El consumo de narcóticos distintos de la heroína (incluidos Vicodin, OxyContin, Percocet, etc.) sólo se declara entre los alumnos de 12º grado, y disminuyó en 2024, con un 0,6% que declaró haberlos consumido durante los últimos 12 meses (lo que refleja un mínimo histórico, en comparación con un máximo del 9,5% en 2004).
- La abstinencia, o no consumo, de marihuana, alcohol y nicotina en los últimos 30 días, se mantuvo estable para los alumnos de 8º grado, con un 89,5% que declaró haberse abstenido del consumo de estas drogas en los últimos 30 días anteriores a la encuesta. En cambio, esta cifra aumentó para los dos grados superiores, ya que el 80,2% de los alumnos de 10º grado declararon abstenerse de cualquier consumo de marihuana, alcohol y nicotina en los últimos 30 días (en comparación con el 76,9% en 2023) y el 67,1% de los alumnos de 12º grado declararon abstenerse del consumo de estas drogas en los últimos 30 días (en comparación con el 62,6% en 2023).
Acerca del Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas (NIDA): El NIDA es parte de los Institutos Nacionales de la Salud, del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos. El NIDA apoya la mayor parte de la investigación a nivel mundial sobre los aspectos de salud relacionados con el consumo de drogas y la adicción. El Instituto lleva a cabo una gran variedad de programas para informar a la política, mejorar la práctica y avanzar en la ciencia de la adicción. Para más información sobre el NIDA y sus programas, visite https://nida.nih.gov/es/
Acerca de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH): Los NIH, la agencia de investigación médica del país incluye 27 Institutos y Centros y es un componente del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos. Los NIH son la agencia federal principal que conduce y apoya la investigación médica básica, clínica y traslacional, y están investigando las causas, los tratamientos y las curas de enfermedades tanto comunes como raras. Para más información sobre los NIH y sus programas, visite www.salud.nih.gov
Acerca de los trastornos por consumo de sustancias: Los trastornos por consumo de sustancias son afecciones crónicas y tratables de las cuales las personas se pueden recuperar. En 2022, más de 49 millones de personas en los Estados Unidos padecían de al menos un trastorno por consumo de sustancias. Los trastornos por consumo de sustancias se definen en parte por el consumo continuado de sustancias a pesar de las consecuencias negativas. También es un trastorno recurrente, en el que los periodos de abstinencia (no consumir sustancias) pueden ir seguidos por un regreso al consumo. El estigma puede hacer que las personas con trastornos por consumo de sustancias sean menos propensas a buscar tratamiento. Utilizar el lenguaje preferido puede ayudar a informar con precisión sobre el consumo de sustancias y la adicción. Vea la guía del NIDA disponible en línea.
NIH… Transformación de Descubrimientos en Salud