Actualmente, la mayor parte de la metanfetamina que hay en Estados Unidos se fabrica en México. La elaboración está a cargo de organizaciones criminales transnacionales.44 Esta metanfetamina es sumamente pura y potente y su precio es bajo. También es posible fabricar fácilmente la droga en laboratorios clandestinos pequeños con ingredientes de venta libre y relativamente económicos como la pseudoefedrina, un ingrediente común en los medicamentos para el resfrío.
Para reducir la producción de metanfetamina, en el 2005 el Congreso aprobó la ley Combat Methamphetamine Epidemic Act, que requiere que las farmacias y otras tiendas minoristas mantengan registros de las compras de los productos que contienen pseudoefedrina y limiten la cantidad de esos productos que una persona puede comprar por día. Las restricciones en las sustancias químicas empleadas en la elaboración de metanfetamina en Estados Unidos han reducido en forma significativa la fabricación local de la droga. En el 2010, hubo 15,256 incidentes en laboratorios de metanfetamina en el país, cifra que se redujo más del 80%—a 3,036—en el 2017.44 Los datos sobre la confiscación de drogas indican que la mayor parte de la fabricación de metanfetamina dentro del país se realiza en laboratorios pequeños que elaboran dos onzas o menos de la droga con productos domésticos de uso común.44
México también ha aumentado las restricciones de la pseudoefedrina y otros productos químicos precursores de la metanfetamina. Pero los fabricantes se adaptan a estas restricciones por medio de operaciones de "smurfing" a pequeña o gran escala: obtienen pseudoefedrina en varios lugares distintos, en cantidades por debajo del límite legal, utilizando una variedad de identificaciones falsas. Los fabricantes en México también están usando cada vez más un proceso diferente de producción (llamado P2P, que es la sigla de fenil-2-propanona, la sustancia química precursora de la pseudoefedrina) para fabricar metanfetamina que no requiere pseudoefedrina.
Cuando la metanfetamina entra de contrabando a Estados Unidos en forma líquida o en polvo, los laboratorios de conversión locales la transforman en metanfetamina cristalizada. Estos laboratorios no requieren de gran equipamiento, por lo que pueden ser pequeños y, por lo tanto, fáciles de ocultar. Esto presenta un problema para las autoridades.44 Recientemente, también ha surgido la metanfetamina comprimida en forma de píldora con la intención de que se parezca al éxtasis, posiblemente para hacerla más atractiva para las personas que no la han probado nunca.44 Al igual que lo que sucede con otras drogas ilegales, como la heroína y la cocaína, a veces a la metanfetamina se le agrega fentanilo.44
La producción de metanfetamina es también un problema medioambiental; la droga incluye muchas sustancias químicas peligrosas y fáciles de obtener, como acetona, amoníaco anhidro (fertilizante), éter, fósforo rojo y litio. La toxicidad de estos productos puede quedar en el ambiente próximo a un laboratorio donde se produce metanfetamina—incluso mucho tiempo después de que se cierre el laboratorio—y causar una gran variedad de problemas de salud. Debido a estos peligros, la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (U.S. Environmental Agency) ha dado instrucciones para la limpieza y descontaminación de los laboratorios de metanfetamina.